Me robé un sobre
Me robé una esquela
Me robé un escritorio
Me robé un pisapapeles
Me robé una foto de carne
Me robé un delirio
Me robé una entrega
Me robé un escalofrío
Me robé un desenfreno
Me robé una noche en blanco
Lo que nunca me robé, eso si, fue un corazón
No hay comentarios:
Publicar un comentario